Con el 65% de la infraestructura remodelada, con el parque automotor actualizado, un portafolio de servicios amplio y competitivo y un cierre financiero que denota organización, rentabilidad y sostenibilidad, el hospital Raúl Orejuela Bueno, se posiciona hoy como una de las empresas sociales del Estado de mayor crecimiento y solidez en la región.
El Concejo de Palmira le dio vida al Hospital Raúl Orejuela Bueno desde la creación del Centro de Salud “24 horas” La Emilia, en 1996. A lo largo de los años, el hospital ha superado los retos de las crisis del sistema de salud y ha logrado transformarse para salir adelante y mantenerse como institución pública y social de la ciudad.
El hospital cuenta con 36 instituciones prestadoras de servicios de salud en la zona urbana y rural. Además, es referente de atención para el nodo suroriental que comprende Florida, Pradera, Candelaria, Cerrito y principalmente Palmira, brindando servicios primarios y complementarios de salud como: consulta especializada, atención del parto, internación adulto, pediatría, obstetricia, cirugía ginecológica, urgencias, son algunos de los que hacen parte del portafolio.
Por otro lado, esta entidad cuenta con contratos con Emssanar, Nueva EPS, Asmetsalud, Compensar, Policía Nacional, Cosmitet, prestando servicios en el departamento del Valle del Cauca, atendiendo a la población migrante, con apoyo de OIM, que financia tecnologías para estos usuarios. Presta servicios al régimen contributivo: Sanitas, Sura, SOS, Comfenalco, a las aseguradoras del SOAT y al ADRES, por concepto de accidentes de tránsito. Ha logrado madurar a modelos de contratación, basados en pagos prospectivos, que representan un reto técnico y económico para el hospital y el asegurador, pero que su buen desempeño resulta costo-efectivo para los usuarios.
Entre 2023 y 2024, el Hospital Raul Orejuela Bueno ha logrado fortalecer la capacidad de atención, mejorando la infraestructura física y tecnológica desde la adquisición de tres ambulancias (2 básicas y 1 medicalizada), la remodelación del servicio de urgencias (incluyendo su sistema de ventilación y de oxígeno), la adecuación del 4 piso del hospital para contar con sala de internación pediátrica, con capacidad para atender a la población infantil del municipio. Asimismo se adecuó y dotó totalmente la sala de ginecobstetricia, pasando de 5 a 10 camas de observación, de 1 a 2 salas de atención del parto y logrando atender en promedio 200 partos mensuales. Se renovaron y dotaron 18 puestos de salud, todos ellos de la zona rural, dando apertura a instituciones que por años estuvieron cerradas. Se terminó el proyecto Centro de Excelencia en Salud La Emilia, mejorando su funcionalidad interna y enluciendo el entorno perimetral, lo que permite volver a posicionarlo como centro de atención primaria, referente en el municipio.
Cabe resaltar que desde 2014 hasta 2020, la entidad estuvo en un programa de saneamiento fiscal y financiero, el cual no logró cumplir, motivo por el cual la Supersalud en 2022 la notificó sobre la obligación de suscribir un programa de mejoramiento institucional, buscando el saneamiento de la ESE. El HROB formuló un programa que fue avalado por la Gobernación y la Superintendencia, cuyo objetivo principal fue sanear las finanzas del hospital, pagando los pasivos, corrigiendo el déficit y mejorando la eficiencia técnica. El programa se desarrolló entre 2022 y 2023, el cual tuvo como resultado el fortalecimiento de los ingresos, la contención de costos. Él informe concluye que el HROB si ha cumplido sus metas de ingresos, Para el total de ingresos, el hospital proyectó recaudar $73.559 millones, al cierre de la vigencia 2023 reconoció $106.923 millones equivalentes al 145,36% y recaudo $77.362 millones correspondiente al 105,17% de lo proyectado, cumpliendo con lo proyectado para ingresos totales. Así mismo, la entidad logró corregir el déficit de la operación corriente, superando sus metas de recaudo y aplicándolo al saneamiento de pasivos. Esto se debe a la gestión de nuevos contratos y mejores modalidades de contratación con EPS, sumado a la contención y disminución continua de costos.
El ente departamental precisa que “una vez analizados los ingresos y los gastos, al cierre de la vigencia 2023 resulta un superávit fiscal (total ingresos reconocidos – total gasto comprometido) por valor de $25.511,8 millones, superávit que representa el 24% del total reconocido, excedente que puede estar en gran parte en la cartera corriente de la Institución, donde debe continuar con la gestión de recuperación. El otro equilibrio, que es operacional (total ingresos recaudados – total gastos comprometidos), resulta un déficit por valor de $-4.049 millones, valor que a su vez compone los pasivos corrientes (menores a 45 días) de cierre de la Institución; situación que no es alarmante, dado que por la dinámica presentada por la Institución, estos podrían cancelarse en el primer trimestre de 2024, la ESE no tiene más pasivos, los pasivos mayores a 360 días fueron cancelados casi en su totalidad con el apalancamiento ofrecido por la Entidad Territorial (Municipio de Palmira).”
Por otra parte, también indica que “el Hospital mejoró el recaudo de la operación corriente en venta de servicios, en el segundo trimestre de 2023 sólo alcanzaba el 41,61% y al cuarto trimestre de 2023 ascendieron a 69%, un indicador muy importante, lo que denota la gestión del Hospital por mejorar el recaudo, para el cumplimiento de las obligaciones y no crecer el pasivo. Con respecto a los pasivos, aunque estos no cerraron en cero, y como se explica en el componente de este informe (temas pasivos), el saldo por pagar es de 45 días, es decir que la ese al primer trimestre 2024 ya los tiene cancelados, y los únicos pasivos que se pudiesen generar son los corrientes, debido a la dinámica de recaudo ocasionada por las EPS, en especial EMSSANAR”.
En conclusión, la Gobernación del Valle del Cauca afirma, frente al PMI que “Por último, se puede inferir que el Hospital Raúl Orejuela Bueno dio cumplimiento al Programa de Mejoramiento Institucional, recomendando al Hospital, continuar con el cumplimiento de las medidas y fortalecimiento de su gestión, para sostener el no riesgo financiero que ostentan en la actualidad. A la vez, recomendar a la Superintendencia Nacional de Salud considere la finalización y cumplimiento del Programa para la ESE, al cierre de la vigencia 2023.”